La prensa opina...

 

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Billetera
  “En la columna pasada, disponible en www.oem.com.mx/
elsoldemexico/notas/s3233.htm, hablamos sobre las reglas para el borrado del historial crediticio. Pero, ¿sabe usted cómo es que se ingresa a Buró de Crédito? Tal vez piense que sea por incumplir con un pago o por tener mora en nuestros productos crediticios bancarios y/o comerciales. La verdad, es otra. A Buró de Crédito ingresamos todos desde el momento en que solicitamos un financiamiento.
Una forma muy sencilla de empezar con un expediente en Buró de Crédito es a través de productos muy accesibles como lo son, por ejemplo, un plan de telefonía celular o una suscripción de televisión de paga. Estos créditos comerciales, como lo son también las tarjetas de tiendas departamentales o de autoservicio, complementan la oferta crediticia que ofrece el sector financiero, entre los que se incluyen a las tarjetas de crédito, crédito personal, crédito automotriz, crédito hipotecario, etcétera.
Empezar a manejar un crédito, tan pronto como nuestro presupuesto familiar lo permita, es una muy buena idea, ya que con ello se genera un historial crediticio en Buró de Crédito. Este historial reúne las experiencias crediticias que formarán la llave que necesitaremos para más tarde poder aspirar a créditos sofisticados e importantes.
Los otorgantes de crédito que consultan tu historial, siempre con el permiso del titular de la información, buscan en él certidumbre de que sabemos manejar y pagar nuestros compromisos financieros. A la vez, este documento les ayuda a calcular si tenemos suficiente capacidad crediticia, es decir que tenemos suficientes recursos disponibles, para poder cumplir con las responsabilidades del financiamiento que se les está solicitando.
Recordemos que Buró de Crédito no es una lista negra, ya que tanto el buen o mal manejo de un crédito forman parte de nuestro historial, por lo que es importante pagar nuestros créditos a tiempo. Si se te olvidó o pasó un pago, no te preocupes demasiado, ponte al corriente para que ese registro de incumplimiento de pago no pese en el momento de la evaluación de una solicitud de crédito. Si tienes retrasos importantes, comunícate lo antes posible con la institución que te otorgó el crédito en búsqueda de una reestructura, descuento, quita, etcétera. En caso de buscar y aceptar un acuerdo por tu iniciativa, tu historial crediticio así lo reflejará.
En cambio, si esperas hasta que el otorgante del crédito te busque para ofrecerte algo, la clave de observación es diferente, pues muestra que no tuviste la iniciativa de buscar una solución a tus retos de impago. Recuerda que no pagar tus créditos puede ocasionar que se generen intereses u otros cargos que incrementarán tu adeudo; no pagar es la peor de las opciones.
En resumen, si tenemos un historial que muestra atrasos y adeudos importantes será complicado, más no imposible, que alguien nos confíe un crédito porque pensarán que hay pocas probabilidades de que podamos o queramos pagar el crédito que estamos solicitando.
Al momento de elegir un crédito consulta a detalle el contrato donde vienen definidas cosas muy importantes como las penalidades, seguros, características del producto, etcétera. Conoce y compara las opciones que hay en el mercado y contrata la que más se ajuste a tus necesidades y presupuesto. Apóyate en los materiales disponibles en las sucursales de los otorgantes de crédito, sus páginas de internet, y también en los simuladores y calculadoras que ofrece la Condusef en su sitio de internet. Cuando ingreses tu solicitud de crédito ten presente que cada otorgante de crédito tiene sus propios modelos de negocio y criterios de riesgo, por lo que no debemos desanimarnos si nos rechazan una solicitud de crédito. Si esto sucede puede ser porque no cumplimos con el perfil de cliente que el otorgante de crédito busca para ese producto.
Finalmente, para mantenerte al tanto sobre tu historial crediticio no olvides consultarlo gratis una vez cada doce meses en www.burodecredito.com.mx”.
El Sol de México, 26 de junio de 2013, Wolfgang Erhardt.

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Crece ahorro pese a poco avance de ingreso
 
“Los recursos de los mexicanos representados por los depósitos en cuenta de ahorro, tandas y cajas de ahorro, entre otros, ascendió a 61 mil 888 millones de pesos trimestrales durante el 2012, lo que representó un crecimiento del 24.2 por ciento con respecto al 2010.
Este desempeño supera ampliamente al aumento de 8.3 por ciento en el ingreso corriente en el mismo periodo, de acuerdo con cifras reportadas en la Encuesta Nacional de Ingreso y Gasto, dada a conocer recientemente por el INEGI.
El dinamismo en el ahorro se acompañó con cambios importantes en su estructura. Los recursos dedicados a este propósito por los integrantes de los hogares en nuestro país ubicados en los deciles del primero al noveno han perdido terreno, al pasar de 52.1 por ciento del total en 2008 al 39.0 en 2012.
Solamente una pequeña parte de la población, ubicada en la cúspide de la pirámide, pudo incrementar su participación relativa en el total de los ahorros, al pasar del 47.9 al 61.0 por ciento, en el lapso de referencia.
El reacomodo en la estructura del ahorro se debe a que los recursos de los hogares se han desenvuelto en diferentes carriles de velocidad, producto fundamentalmente de la evolución de los ingresos y de la disponibilidad de diferentes alternativas para su colocación.
Los depósitos de los hogares, con excepción de 10 por ciento de ellos, ascendieron a 24,154 millones de pesos trimestrales en el 2012, lo que representó un anémico crecimiento de 1.2 por ciento con respecto al 2010.
En tanto que en el decil más alto, los depósitos ascendieron a 37,734 millones de pesos, con un aumento de 45.4 por ciento.
Las familias de más bajos recursos han tenido que dedicar una mayor aparte de sus recursos a rubros como la alimentación y el transporte, lo que le ha quitado capacidad de ahorro. Este mismo fenómeno, aunque en menor medida, también se observa en los estratos medios”.
El Financiero, 23 de julio de 2013, Esteban Rojas H.

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