El mundo del crédito

Ofertas y felices fiestas, a nuestro alcance

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Así, casi sin darnos cuenta llegamos al último mes del calendario, la época del año en que salimos a buscar el detalle que sintetice o muestre de algún modo el cariño que sentimos por nuestros seres queridos.

Pero... es también cuando somos más propensos a realizar compras impulsivas, ya sea para sentirnos mejor o, si nuestro estado de ánimo ya era alegre, para mantenerlo así, esto de acuerdo con una investigación realizada por la European School of Management and Technology (1).

Para evitar que estas adquisiciones impulsivas afecten nuestras finanzas en el mediano o largo plazos, te ofrecemos algunos sencillos consejos para ayudarte a identificar las ofertas de temporada que realmente convienen.

El primero es comparar precios. Suena obvio, pero con tantas tiendas y ofertas que se nos presentan, es fácil olvidar dónde vimos el producto de nuestro interés a mejor precio. Por eso, siempre es útil llevar algo para hacer anotaciones (lápiz y papel o algún dispositivo electrónico, para los más modernos).

Cabe también considerar lo que la Revista del Consumidor menciona en su edición de noviembre, en la que dividió las promociones en aquellas para pagar menos y las que se refieren al tiempo (2).

En la primera categoría están los porcentajes de descuento. Es posible que el comercio A ofrezca un porcentaje de rebaja más alto que el comercio B, pero si el precio base del primero es mayor que el del segundo, en realidad no hay oferta que anhelar. Comparar sigue siendo la clave.

En la segunda categoría, están los meses sin intereses. Aquí entran en juego otras variables, como el tiempo y monto total de la adquisición, así como la duración del bien o producto conseguido.

Durante los meses de la promoción, nuestra situación económica puede cambiar (tanto para bien como para mal) o pueden cruzarse algunos días en los que hay que hacer desembolsos considerables (planeados o imprevistos) e incluso puede ocurrir que sigamos pagando tiempo después de que lo adquirido dejó de sernos útil.


Comprar - comparar

En esta parte hay que poner especial atención en los pagos con tarjeta de crédito a meses sin intereses, en lo que se refiere al Costo Anual Total (CAT).

El CAT incorpora en una sola cifra todos los costos al contratar cualquier tipo de crédito. Además de la tasa de interés, considera comisiones, seguros y otros gastos relacionados con el financiamiento (3). Al tomar en cuenta todo esto sabremos, a ciencia cierta, el monto real a cubrir al obtener algo mediante nuestra tarjeta de crédito, ya sea bancaria o de alguna tienda departamental.

Para saber cuánto pagarás al final bajo este esquema, multiplica la mensualidad o pago semanal por el número de pagos y a esta cantidad réstale el valor del bien si lo liquidaras de contado. La diferencia es lo que pagas adicionalmente por la comisión.

Desde luego, también es muy importante comparar la calidad de lo que vamos a comprar y las características específicas de cada producto, a fin de adquirir lo que mejor corresponda a lo que queremos obtener.

En resumen, todo es cuestión de planificar adecuadamente cómo y en qué utilizamos nuestro dinero, de esa forma podremos disfrutar tranquilamente tanto las fiestas como el año por venir.

Además, en Buró de Crédito estamos para ayudarte durante 2013 como lo hemos hecho siempre. ¡Consúltanos y aprovecha nuestros productos!

Felices fiestas y ¡vamos hacia adelante!

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1) El Economista, 14 de noviembre de 2012, página 15.
2) Revista del Consumidor, noviembre 2012, páginas 23-25.
3) www.condusef.gob.mx (comunicados 2009).