Adicionalmente, se señala que sin embargo, hay algo que tienen en común todos los jóvenes de entre 18 y 36 años y que los hace un segmento privilegiado en la banca: primero, casi todos los millennials tienen entre sus prioridades disfrutar de buenas experiencias; y segundo, este segmento es el que más ventajas de exclusividad puede obtener con su propio banco vía los plásticos.

Desde esta perspectiva, se mencionan 4 razones por las que es recomendable que un millennial cuente con tarjeta de crédito. A continuación te las presentamos, brevemente resumidas:

1. Una oportunidad de asegurar el futuro
   
   Generalmente se niegan créditos, no sólo de tarjetas bancarias, sino automotrices, de hipotecas y hasta de urgencias hospitalarias, por carecer de un historial crediticio. Al no tener una referencia sobre qué tan buenos o malos pagadores son los nacidos entre 1980 y 2000, sus opciones de financiamiento se limitan. Con una tarjeta de crédito esto se facilita, además de que cuando se agregan beneficios como accesos preferenciales o eventos exclusivos aumenta su interés entre los jóvenes.
   
   
2. Un buen comienzo
   
   Una recomendación ideal para los millennials es arrancar un historial crediticio con una tarjeta básica. Por ley, todos los bancos están obligados a ofrecer una tarjeta de crédito básica con requisitos mínimos. No te dará una línea de crédito muy grande pero ayudará a formar un buen historial rápidamente si tienes un manejo responsable.
   
   
3. Adquiere una tarjeta con experiencias
   
   Si ya has manejado antes una tarjeta de crédito o tienes un buen historial crediticio por usar otros servicios financieros, por ejemplo un plan de pago de telefonía celular, lo más probable es que ya seas candidato a una tarjeta que recompense con experiencias, descuentos en viajes, puntos acumulables para ser canjeados por otros beneficios, etc.
   
   
4. No hay tarjetas ideales, hay clientes que saben buscar
   
   Como cualquier grupo de personas, tampoco puede decirse que todos los millennials sean iguales. Para algunos jóvenes emprendedores pueden ser indispensables los viajes o la visita a restaurantes y hoteles, en ese caso será útil una tarjeta centrada en experiencias. Si les interesan cosas más cotidianas como hacer pagos del supermercado, ropa o comida, quizá una tarjeta básica sea una mejor opción. Entre más pronto y mejor evalúes tus necesidades y tu capacidad de pago llegarás más rápido a los instrumentos financieros que cubran tus necesidades y te ayuden a potenciar unas finanzas sanas.

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¹Economista y colaborador en diversos medios sobre finanzas y tecnología.