(Moneyball)
Los Atléticos, el equipo de beisbol de Oakland, han recibido dos fuertes golpes: no sólo acaban de perder su oportunidad de disputar la Serie Mundial a mitad de la temporada, sino que sus jugadores estrella decidieron dejarlos por contratos más lucrativos con equipos más grandes.
Billy Beane, el entrenador del equipo, está contra la pared. Necesita mejores jugadores, pero no tiene el dinero para contratarlos.
Pero, no todo está perdido. En este momento tan complicado, conoce a Peter Brand, un joven analista de datos que convence a Billy de conseguir jugadores cuyo rendimiento en conjunto puede dar iguales o mejores resultados que los “prodigios” que ganan cientos de miles de dólares por juego, pero que han sido descartados por opiniones subjetivas (su forma de lanzar es rara, no tienen una buena sonrisa o, incluso, porque tienen una novia fea).
Estos dos hombres están a punto de cambiar la forma en que se ve, se entiende y se juega el Rey de los Deportes… cueste lo que cueste. ¡La pelota está en juego!
Irónicamente, algo que hay que aplaudirle al director Bennett Miller es que logra hacer de Moneyball (una historia predominantemente matemática) una cinta no sólo fluida y sencilla, sino también humana.
A
través de ecuaciones, números y el carisma particular que suele
imprimirle Brad Pitt a sus papeles, nos llama la atención sobre la
manera en que pasamos por alto detalles realmente importantes, dando
preferencia a otros que ciertamente no significan nada.
Una cinta para
aprender el valor tanto del dinero, como de las personas.
¡No dejes de
comprarla o rentarla para disfrutarla con toda la familia!
___
Moneyball.
El juego de la fortuna (Moneyball, 2011. Dir.: Bennett Miller. Guión:
Steven Zaillian y Aaron Sorkin. Reparto: Brad Pitt, Jonah Hill, Philip
Seymour Hoffman y Chris Pratt, entre otros).